Durante el viaje que hizo Kim Kardashian pensó seriamente en adoptar a la joven Laddawan Tong-Keaw (Pink), una niña de 13 años de edad que vivía en un orfanato de Phang Nga, pero la política de la adopción tailandesa y el miedo de la pequeña al dejar su hogar atrás, hicieron que los planes de la socialité se vinieran abajo.
Ahora, meses después de haber tomado esa decisión, Pink asegura que fue lo correcto, pues no quería ser adoptada por una celebridad y por su marido, el rapero Kanye West, aunque en un principio la niña estaba muy emocionada por la idea
«Cuando me enteré que quería adoptarme me puse a temblar. Estaba muy emocionada, iba a ser un gran cambio en mi vida, pero hablé con mi madre y me dijo: ‘Cuando acabes el instituto y seas capaz de cuidar de ti misma te daré permiso para irte a vivir con Kim si todavía quieres’, pero no me hice a la idea de marcharme y dejar a los demás niños del orfanato, quiero ayudar a mi país», comentó Pink.
Aunque rechazó la idea de convertirse en una Kardashian, la niña de origen tailandés espera conocer algún día a la que pudo haber sido su familia, en especial a Kanye y a la pequeña North West.
Fuente: Tvnotas